Allí fue nombrado generalísimo del ejército inglés, donde fue recibido con extraordinario aplauso.
Fue incluido en el consejo real, instalado en una casa junto al palacio de St.
Tomó parte principal en la toma de Boulogne en calidad de diplomático, velando en las negociaciones más por los intereses españoles que por los ingleses, capitulando la plaza en 1544, tras haber permanecido seis meses sitiada.
Por esta actuación recibió de Inglaterra 30 000 ducados, que le fueron robados por los franceses entre Calais y Dover, cuando la caravana que portaba su equipaje regresaba a Inglaterra.
Siendo niño su padre le concertó matrimonio con Juana de Aragón, hija bastarda de Fernando el Católico, proyecto que no prosperó.