Belalcázar

Desglose de población según el Padrón Continuo por Unidad Poblacional del INE.

Dentro de este recinto, y en lo más elevado del montículo, se construye el Bello Alcázar que da nombre a la villa, cuya obra corresponde a la segunda mitad del siglo XV.

Sin embargo, el sorprendente efecto que produce la fortaleza obedece particularmente a la torre del homenaje, emplazada en el muro oriental con una altura de 47 metros, es la más grandiosa de todas.

Sus superficies se aprovechan para unos gigantescos escudos de los Sotomayor con bandas traqueadas.

Adosado a la fortaleza, bordeando el ángulo desde la torre del homenaje, se levantó un palacio renacentista en 1539 con la supervisión de Hernán Ruiz I y ejecución de un maestro local.

En el kilómetro 12 de esta vía surge un camino que lleva al castillo, atravesando el cauce de poca altura del río, y ascendiendo tortuosamente hasta la fortaleza.

Historia El castillo de Madroñiz fue construido por los árabes en los siglos XI o XII, aprovechando una antigua población musulmana, y fue utilizado con fines más residenciales que bélicos, aunque originalmente fue un recinto defensivo.

Mejías se casó con una heredera del marquesado de La Guardia, y unieron sus posesiones.

Descripción Al entrar en el recinto se pueden observar una torre, vacía en su interior, y un torreón, ambos cilíndricos.

El convento, muy extenso, está constituido por numerosos patios y dependencias que dan lugar a una compleja organización.

Estas galerías del claustro aún se cubren con artesonados planos, vistosos por sus lacerías y decoración pintada.

D. Luis María Ramírez escribió, hacia el año 1840, lo siguiente: Información oral llegada hasta nuestros días, referente a las décadas de los años veinte y treinta del pasado siglo XX, nos dice que ésta romería, por aquellos años, solía ser más concurrida que la de la Alcantarilla.

También los arcos formeros, todos rebajados, deben proceder de esta reforma.

El retablo del siglo XIV o XV así como la imagen de Ntra.

Había también una verja de hierro forjado que protegía el presbiterio y un púlpito.

Se inició en 1559 y treinta años después se hallaba a medio construir, lo que explica que no se pusiera fin a su construcción hasta el siglo XVII, correspondiendo a esta última fase la parte de los pies: la fachada, torre y portada.

Con un espíritu más tridentino, se prefirió para el templo una disposición que permitiera una mayor unidad espacial y, consecuentemente, mejor visión y audición, concibiéndose como una gran nave con capillas laterales alojadas entre los contrafuertes.

No obstante, siguen hermoseando en dicho interior las bellas portadas del Seisciento que se conservan en las entradas de algunas capillas.

A los pies, su desnuda fachada se remata en un gallardo cuerpo de campanas muy clasicista.

La torre está inconclusa, dado que el proyecto contemplaba un piso más de altura.

Dichos arcos arrancan del propio suelo, y están construidos con piedra de granito.

Presenta portada plateresca y una cúpula bastante plana decorada en círculos, atribuida a Hernán Ruiz el Viejo.

Es del siglo XV y constituye un testimonio claro de las obras que, con posterioridad a la fundación, se practicaron en el templo, aunque todavía pueden verse rasgos góticos que avalan la antigüedad del edificio.

Bien es verdad que en el primer cuerpo descrito, justamente el que encontramos nada más franquear la portada, tiene ya bóvedas de cañón y de arista, más en consonancia con fechas más tardías, ya a partir del XVII, pero cabe la posibilidad de que obedecieran a una reforma.

Mientras que parece más lógico que el primero, contiguo a la portada y con unas cámaras abovedadas debajo, sirviera para almacén de grano, por la cuestión del aislamiento de la humedad, la otra parte pudo haber sido utilizada para vino o aceite.

Después, pocas reformas parece haber sufrido y si las hubo, no han desvirtuado el carácter primigenio de su estructura, por lo que se manifiesta hoy como uno de los ejemplares mejor conservados en la provincia.

No hay en el pueblo grandes construcciones palaciegas, sino alguna casas señoriales, marcadas con escudos nobiliarios en su fachada, destacando la del escritor y periodista Andrés García de la Barga y Gómez de la Serna (Corpus Barga), llamada Casa Grande, típico inmueble dieciochesco, hoy arruinado, con fachada articulada en dos cuerpos por orden gigante de pilastra y vistosa portada- balcón, todo ello de piedra local, destacando sobre paramentos encalados.

Es, quizás, la ermita más antigua de la "Era Cristiana" con la que cuenta el municipio.

La tradición manda dar tres vueltas a la ermita para que no nos duela la barriga el resto del año.

A primeros de mayo comienzan las cruces donde todas la calles y casas son engalanadas con cruces que los vecinos han ido elaborando a lo largo del año.

Explotación ganadera cerca de Belalcazar. Junio 2022
Detalle de la Torre del Homenaje del Castillo de los Sotomayor y Zúñiga desde el estanque de El Pilar
Castillo de los Sotomayor Zúñiga y Madróñiz
Convento de Santa Clara
Convento de Santa Clara
Vista de Belalcázar
Iglesia de Santiago el Mayor
Interior de la Iglesia de Santiago el Mayor de Belálcazar
Casa consistorial de Belálcazar
Nuestra Señora de Gracia de Alcantarilla, patrona de Belalcázar . Parroquia de Santiago el Mayor de Belalcázar, Córdoba.