Fue descubierta en 1915 cerca de Baveno, en la región del Piamonte (Italia),[1] siendo nombrada así en honor de Alessandro E. Bazzi, su descubridor.
Es un silicato hidratado de berilio, escandio, hierro, magnesio y sodio.
Es el análogo con escandio del berilo, grupo al que pertenece.
Se encuentra en el interior de cavidades miarolíticas del granito, así como en vetas en rocas alpinas tipo pegmatita y en granito pegmatítico.
Suele encontrarse asociado a otros minerales como: cuarzo, ortoclasa, moscovita, laumontita, albita, hematites, calcita, clorita, fluorita, berilo o bavenita.