Batalla del Cañoncito

El 8 de agosto, Armijo emitió una proclama al pueblo de Nuevo México, exhortando a prepararse para repeler la invasión estadounidense.

Armijo trataba de evitar la batalla, pero el comandante del ejército regular, Diego Archuleta, y los oficiales de la milicia, Manuel Antonio Chávez y Miguel Pino querían defender el territorio.

En la preparación para la defensa de Santa Fe, Armijo creó su cuartel general al este del pueblo en un paso angosto, pero finalmente decidió no luchar.

Cuando Pino, Chávez, y la milicia insistió, Armijo ordenó que el cañón fuese apuntado hacia ellos.

El 15 de agosto, Kearny y su fuerza entró a Santa Fe declarando a Nuevo México como Territorio de los Estados Unidos sin que se hubiese disparado un tiro.