Sus nombres tradicionales (Melchor, Gaspar y Baltasar) se considera que provienen de un manuscrito griego del 500 d. C. traducido al latín.
[4] Este rey es mencionado en el capítulo 5 del Libro de Daniel.
Los magos siguieron la estrella de Belén primero al palacio de Herodes el Grande, que les dijo que regresasen a él cuando hubiesen encontrado al mesías nacido (Mateo 2:11).
Cuando llegaron al pesebre donde estaba Jesús le dieron como regalos oro, incienso y mirra.
[5][6] La tradición dice que Baltasar era el portador de la mirra.