[1] Esto significa que debe contar con algún fundamento, en principio, reconocido por los subordinados.
Como define David Laitin, la autoridad es un concepto clave que hay que definir para determinar el alcance y el papel de la teoría, la ciencia y la investigación políticas.
En los últimos años, sin embargo, la autoridad en contextos políticos ha sido cuestionada o puesta en tela de juicio.
Las necesidades de supervivencia, obligaron a las personas a establecer unas normas que les permitieran poder afrontar los peligros y contratiempos de un medio hostil, como son las demás personas y la naturaleza.
En función del objetivo y de la situación, las personas utilizan una determinada táctica.
[9] Robert Cialdini sistematizó las tácticas que observaba en los profesionales (vendedores, publicistas, líderes políticos o religiosos) en relación con seis principios psicológicos ligados a la influencia.
Milgram buscaba una explicación psicosocial a hechos como el Holocausto, estableciendo un vínculo entre la influencia ejercida por los nazis y los experimentos en el laboratorio.
Si los ciudadanos creen que un régimen político es legítimo, entonces los gobernantes son legítimos.
[13] Sin embargo, el concepto político de legitimidad establecido por Max Weber es controvertido.
Algunos juristas como Carl Schmitt afirman que la autoridad racional-legal weberiana podría ser el fundamento de la obediencia a regímenes dictatoriales.
En este sentido, la solución pasa porque la legitimidad vaya ligada al concepto contemporáneo de democracia.
A los efectos penales se reputará autoridad al que por sí solo o como miembro de alguna corporación, tribunal u órgano colegiado tenga mando o ejerza jurisdicción propia.
[cita requerida] Una definición más completa sería "la facultad para tomar decisiones que produzcan efectos".