Estuvo casado con María Angélica Ayala Cabeda, de nacionalidad uruguaya e hija de Araminto Ayala, cónsul general del Uruguay ante el Paraguay y María Angela Cabeda, hija del político brasileño Rafael Cabeda, abolicionista y gran exponente de la Revolución federalista riograndense, en Río Grande del Sur, Brasil.
Después vivió un tiempo en Buenos Aires, Argentina donde trabajó en el diario La Razón para perfeccionarse en el periodismo.
Al morir el presidente José Félix Estigarribia, asume de facto el Higinio Morínigo, quien tiempo después comienza una persecución contra muchos ilustres políticos y ciudadanos de extracción liberal, persiguió igualmente a la prensa independiente, es así que, durante su presidencia, el gobierno intervino La Tribuna y lo clausuró en varias oportunidades.
Con la dictadura de Alfredo Stroessner, La Tribuna siguió viviendo situaciones similares y estuvo permanentemente amenazada.
Todo este difícil y arduo trabajo en favor de una prensa independiente y opositora a los regímenes totalitarios en los que se vio sumergido el Paraguay le hicieron merecedor, en el año 1953, del galardón más antiguo del periodismo internacional, el Premio Maria Moors Cabot, que le fue otorgado la Universidad de Columbia de los Estados Unidos.