Arturo Ripstein

Como hijo del productor Alfredo Ripstein Jr., se familiarizó desde muy pequeño con las prácticas y ritmos de la cinematografía mexicana.El temprano debut de Ripstein constituyó una situación extraordinaria para la época, considerando que la rígida estructura sindical de la industria cinematográfica mexicana mantenía cerradas sus puertas a nuevos directores.Las dos últimas lograron colocarlo en el selecto grupo de jóvenes cuya filmografía comenzó a ser estudiada con detenimiento por especialistas nacionales y extranjeros.Después de un breve periodo caracterizado por producciones poco afortunadas, Ripstein encontró en 1985 a la escritora Paz Alicia Garciadiego, quien se convirtió en su mancuerna más efectiva.Variaciones sobre estos temas se localizan en todas sus películas, particularmente en El castillo de la pureza (1972), Principio y fin (1993), La reina de la noche (1994) y Profundo carmesí (1996).Estas características han hecho de Ripstein un director controvertido: amado y odiado por partes iguales, pero nunca ignorado.