El lugar sin límites es una película mexicana de 1978, dirigida por Arturo Ripstein y basada en la novela homónima del chileno José Donoso.
[1] Esta película fue una de las primeras representaciones del cine LGBTTTQ+ en México, teniendo como personaje principal a “La Manuela”, un hombre homosexual travesti; y a “Pancho”, un joven camionero que representa lo que en México, de forma estereotípica, se conoce como “macho”.
[2] En un pueblo pequeño y deteriorado, un prostíbulo casi inactivo, que pertenece a La Japonesita, sobrevive en condiciones de total precariedad.
Entre los temas que se exploran está el estereotipo de ser una persona homosexual en esa época.
A lo largo del filme, se muestra su apoyo, pero también los insultos que Manuela recibe de su hija.
donde los personajes eran retratados de manera ambigua o disfrazada para el público, utilizando elementos humorísticos como una estrategia para evitar la censura.
Visualmente, esta escena se presenta de forma algo alegre y atractiva: La Japonesa aparece bella, con maquillaje y peinado impecable, en un ambiente que podría interpretarse como una relación sexual convencional entre una pareja heterosexual.
La Manuela, en respuesta, actúa cariñosamente y parece tener intenciones de profundizar en su relación.
Esta diferencia en la representación es fundamental y marca el enfoque de Ripstein en la adaptación cinematográfica.