Arquíloco

Arquíloco se nos presenta como poeta soldado, alguien que vivía de la guerra mientras cultivaba la poesía.

Según cuenta Critias, por ese motivo se arruinó económicamente, contrajo numerosas enemistades y, empobrecido, marchó a Tasos.

Terminó sus días durante la defensa de Paros en la guerra contra Naxos, isla cercana.

Arquíloco se hizo famoso en la Antigüedad y pasó a la posteridad como personaje polémico por escritos de Plutarco.

Nietzsche reivindica a Arquíloco, quien, erróneamente, ha sido llamado en la Modernidad "artista subjetivo", es decir, "mal artista"; pero, a quien la división entre "lo objetivo" y "lo subjetivo" resulta "improcedente en estética"[2]​ (El nacimiento de la tragedia, Cap.

Busto que suele atribuirse a Arquíloco.