Desde su infancia tuvo contacto con gente indígena que trabajaba en la mensajería en la que creció, donde aprendió que debían ser tratados como iguales o superiores, esta idea se reforzó durante su educación en preparatoria durante su educación primaria, cuando estudio historia bajo la guía de Guillermo Sherwell, quien veneraba a los indígenas como antepasados de gran renombre y criticaba a la doctrina y religión traída por los españoles.
En 1945 entra por primera vez en contacto con la poesía Nahuatl que le marca con un libro traducido por el padre Ángel María Garibay.
Estas opiniones al parecer repercutirían en su trabajo como traductor de textos clásicos años después.
Entre los años 1951 y 1952 es introducido como becario del Centro Mexicano de Escritores.
Fuego de Pobres (1961) la sensibilidad ahonda este problema social.
El ala del tigre (1969) reúne una vez más, tiempos paralelos de estos mundos culturales distintos.
La flama en el espejo (1979) reúne todos sus libros anteriores, más algunos poemas sueltos escritos entre 1945 y 1965.