Arma de negación de área

Una versión más moderna, que permitía la rápida dispersión y la ventaja de poder ser escondidas más fácilmente, son los abrojos, aunque algunos objetos con una apariencia similar (pequeñas bolas con espinas) han sido usados en la antigüedad.Muchas variantes también fueron usadas, como los tablones con ganchos metálicos descriptos en las batallas de Julio César.[1]​ Los abrojos aún son usados en algunos conflictos modernos, como fue en la Guerra de Corea, en donde las tropas Chinas, que por lo general usaban calzado liviano, eran particularmente vulnerables.[1]​ En tiempos modernos, abrojos especiales son algunas veces usados contra vehículos con llantas neumáticas.156 estados son partícipes del Tratado de Otawa, bajo el que accedieron a no usar, almacenar, producir o transferir minas anti-personas.China, Rusia, Corea del Norte, Siria e Irán han desarrollado o importado tales armas en un esfuerzo por crear una estrategia moderna A2/AD para contrarrestar la proyección de poder estadounidense en aguas cercanas.En el terreno desértico que producen, es imposible para el enemigo desplazarse sin ser avistado, y dejan muy poca cobertura en caso de un ataque, especialmente desde el aire.Muchas armas químicas también producen efectos nocivos en cualquier persona dentro del área afectada.Sin embargo, la mayoría de las veces esto no posee un valor táctico, ya que los efectos de la exposición no se desarrollan lo suficientemente rápido, aunque, nuevamente, los efectos psicológicos en los enemigos pueden ser considerable.
Abrojo usado en Vietnam, en 1968.