Cuando Aristeo nació, Hermes se hizo cargo de él para hacerle tomar la ambrosía y ser hecho inmortal por Gea.
Ya adulto, viajó en barco desde Libia a Beocia, donde fue iniciado por el centauro Quirón en misterios más profundos.
En Beocia se casó con Autónoe y fue padre del malhadado Acteón quien heredó, para su desgracia, la pasión familiar por la caza.
[1] Entonces Aristeo, en su misión civilizadora, visitó Arcadia y se estableció durante una temporada en el valle de Tempe.
Aristeo fue objeto de culto en muchos lugares: Beocia, Arcadia, Ceos, Sicilia, Cerdeña, Tesalia, y Macedonia.
[7] También dicen que Aristeo dejó descendientes en Ceos y después arribó a la isla de Cerdeña.