Antonio Illanes

Precisamente es una carta que dirige a su maestro Marco -y que publica Illanes en su libro "Del nuevo estudio"-, una de las fuentes más interesantes para comprender el credo artístico de este escultor y su rechazo a ciertas vanguardias.

En 1929 el rey Alfonso XIII le impuso la Orden Civil como reconocimiento a la labor que desarrolló para la Exposición Iberoamericana de Sevilla (1929).

En 1960 inauguró una exposición en el Círculo de Bellas Artes de Madrid compuesta por 40 obras realizadas en diferentes materiales: Bronce, piedra, madera.

Están escritos en forma de breves capítulos y en ellos narra sucesos y anécdotas de carácter autobiográfico, que nos permiten seguir su periplo vital, y acercarnos al ambiente cultural -principalmente al sevillano- del momento.

Por estas páginas desfilan personajes muy célebres de los años 1940-1960, tanto españoles como extranjeros, pues el estudio de Illanes era un lugar al que acudían gentes muy variadas: Rita Hayworth, Banus, personajes de la nobleza local, poetas,...También Illanes escribió algunos artículos en prensa, de los que puede destacarse el dedicado a Antonio Susillo, a quien el escultor profesaba admiración Tras la muerte del artista, fue editado de manera póstuma el libro "Sevilla y yo" por su viuda, Dª Isabel Salcedo.

Cristo de la Victoria, obra de Antonio Illanes. Hermandad de la Paz (Sevilla)