Anquíale

Más tarde el nombre de se cambió a Tarso».[2]​ El autor no especifica si Jápeto era uno de los titanes u otro personaje.[3]​ Esta puede ser la misma Anquíale que aparece en la Argonáuticas, pero algunos autores consideran que se trata de personajes distintos: «Al lado construyeron además un altar con un montón de guijarros.Y en derredor, coronados con hojas de encina, se ocupaban del sacrificio, invocando a la muy venerable Madre del Díndimo [Cíbele], la que habita Frigia, y junto con ella a Ticias y Cileno, los únicos que son llamados guías del destino y asistentes de la Madre del Ida entre el número de cuantos son Dáctilos Ideos de Creta, a los que una vez la ninfa Anquíale hizo nacer en la cueva del Dicte, empuñando con ambas manos tierra Eáxide.Mucho le imploraba con súplicas el Esónida [Jasón] que apartara las tempestades, mientras vertía libaciones sobre las víctimas ardientes».