La ubicación sería el Estadio Latinoamericano de La Habana, que cuenta con capacidad para 55 000 personas.
Keith Richards confirmó las negociaciones con los cubanos, y añadió que Cuba lo tomó en serio tras la apertura de embajadas en los Estados Unidos y a la visita del papa a La Habana.
También se informó que el bajista Darryl Jones había influido en la decisión de tocar en ese país.
El tour incluye su segunda vez en Chile (la primera había sido durante el Voodoo Lounge Tour, en febrero de 1995) y su primer show en São Paulo desde la gira Bridges to Babylon, en abril de 1998.
Apodado el Concierto para la amistad, fue el acto más grande realizado en Cuba desde la revolución de 1959.