Alonso de Cárdenas (embajador)

[3]​ Al partir hacia Londres se le dieron instrucciones para que hiciese cuanto pudiese por mejorar las relaciones entre las dos naciones, una amistad que convenía a España por la necesidad de asegurar el paso por el canal de la Mancha y la ruta naval hacia Flandes, a la vez que poner impedimentos al acercamiento entre Inglaterra y Francia, aliada de las Provincias Unidas en su guerra con España.[5]​ Las deterioradas relaciones con el monarca inglés tras el hundimiento de la flota en las Dunas se enrarecieron aún más con la recepción del embajador portugués en Londres.[11]​ El reconocimiento resultó finalmente obligado tras el asesinato en Madrid en junio de 1650 del embajador Anthony Ascham, enviado por el Parlamento.Todavía a comienzos de 1654 Cárdenas era recibido amistosamente por Cromwell, con quien se entrevistaba hablando en latín y sin intérpretes.[12]​ Cárdenas, además, aprovechó la situación que se le brindaba para adquirir valiosas obras de arte.
Alonso de Cárdenas según un grabado publicado en la Historia, e memorie recondite sopra alla vita di Oliviero Cromvele, detto el tiranno senza vizi, il prencipe senza virtu , de Gregorio Leti , parte II, p. 165, Ámsterdam, 1692. [Se trata, en realidad, de un seudorretrato elaborado a partir del retrato del archiduque Matías de Austria firmado por Christoffel van Sichem I hacia 1611].