Asesoró como jurista a la Junta Técnica y al ministerio de Trabajo nacionalista, y participó en la elaboración del Fuero de los Españoles.
1] Tras consultar con el primado, el cardenal Enrique Plá y Deniel,[2] aceptó la cartera y abandonó su cargo en Acción Católica.
Sus gestiones diplomáticas lograron romper el aislamiento de la dictadura, así como la protección y amparo para destacados nazis huidos tras la guerra en Europa.
[4] Llevó a cabo la firma del Concordato con la Santa Sede en agosto de 1953.
[5] Durante su mandato también se efectuó el ingreso de España en la ONU en 1955 y se reconoció la independencia del protectorado español de Marruecos (1956).