El ajimez, palabra que viene del árabe al-šimāsa,[1] es una ventana de dos aberturas que está dividida verticalmente en dos partes iguales mediante una pequeña columna o pilastrilla llamada mainel o parteluz, sobre la que se apoyan dos arcos, generalmente de medio punto o apuntados.
A veces está enmarcada por otro arco, y en el espacio entre los arcos se inserta una decoración, un escudo de armas o una abertura circular.
También se conoce como ventana geminada —adjetivo que se refiere a un objeto formado por dos elementos iguales o bien distintos colocados en parejas— y, en ámbitos de habla catalana, como bífora o ventana biforada.
En la península ibérica, se conoce en la arquitectura visigoda y prerrománica.
También se usó a menudo en época renacentista, aunque más adelante fue abandonada como elemento constructivo, para volver a ponerse de moda en el siglo XIX, en el período ecléctico, con el redescubrimiento de los estilos antiguos (neogótico, neorrenacentista, etc.).