Aguja de ternera

La acepción «aguja» como pastel aparece ya en el Diccionario de autoridades publicado entre 1729 y 1736.

La parte superior del hojaldre suele estar ranurada longitudinalmente y deja ver su contenido.

[3]​ El contenido y calidad de la carne incluida dentro del pastel suele oscilar dependiendo del cocinero que la elaboró, pero por regla general no suele pasar de 20 a 30 gramos.

La presencia en las pastelerías madrileñas hace de la misma casi un fast food.

Una receta del siglo XIX menciona su elaboración: "Dispuesta la pasta de hojaldres y adaptada á un molde, se añade proporcionadamente picadillo de ternera, pechugas, etc., cubriéndolo con otra capa de la misma masa, poniéndolo á cocer en un horno".

Aguja de ternera.
Agujas de ternera de una pastelería de Madrid.