Academia de Ingenieros de Hoyo de Manzanares

Su lema "Nunc Minerva, postea Palas" significa: "Primero la sabiduría, después la guerra".

La Academia continuó sus actividades docentes como centro provisional en Cádiz y, una vez terminada la guerra, volvió a Alcalá hasta que en 1823 fue cerrada definitivamente por Fernando VII, por haberse significado los profesores en la defensa de la Constitución de 1812 durante el Trienio Constitucional.

La Academia permaneció Guadalajara hasta 1931, cuando por la reforma del Ejército llevada a cabo por el Ministro Manuel Azaña se uniría nuevamente a la Academia de Artillería en Segovia.

Se trata de un fondo bibliográfico en torno a materias tales como fortificaciones, arquitectura, electricidad, electrónica, ferrocarriles, telegrafía, aviación, etc.

La Biblioteca histórica de la Academia (4.000 volúmenes entre los siglos XVI al XIX) se encuentra ubicada físicamente en el Museo, aunque existe otra biblioteca de uso para alumnos y profesores del centro.

Por motivos de seguridad, las salas del Museo permanecen cerradas ordinariamente, abriéndose al público cada vez que sea necesario para atender en lo posible a la demanda social.

El horario de visitas se adapta con carácter ordinario al horario académico, y serán en condiciones de gratuidad durante todos los días del año.

Escudo de la Academia de Ingenieros Militares.
Placa conmemorativa de la primera Academia de Ingenieros del Ejército Español
Placa conmemorativa de la primera Academia de Ingenieros del Ejército Español
Primera Academias de Ingenieros en Alcalá de Henares (01/09/1803).