Fue fundado en 1136 por Bernardo de Claraval como el primer monasterio cisterciense en la orilla oriental del Rin, en el lugar ocupado previamente (1116-1131) por una fundación monástica del arzobispo Adalberto de Maguncia, primero por canónigos agustinos y posteriormente por monjes benedictinos.
Según esta, los monjes debían vivir del producto generado por el trabajo de sus propias manos.
Sin embargo, con el objetivo de organizar el trabajo y la oración, surgió más adelante entre los cistercienses la separación en diferentes estamentos.
Entre 1704 y 1715 tuvo lugar la reconstrucción barroca del interior de la iglesia.
Durante el siglo XIX, parte de las instalaciones del monasterio se destinaron a institutos correccionales y para enfermos mentales (Zentrum für Soziale Psychiatrie Rheinblick), albergando desde 1912 un hogar para militares convalecientes.
En 1986 se llevó a cabo la reconstrucción para la conservación de las zonas históricas.