Valle de Aézcoa

Las localidades son pequeñas, formadas por típicas viviendas pirenaicas con paredes de piedra encaladas y tejados pronunciados.

Además, la lengua propia, el vasco, se mantiene viva, conservándose, aunque en estado precario, el dialecto local o aezcoano.

La Junta General del Valle de Aezcoa,[3]​ administra los comunales del valle y entre sus funciones destacan: La Junta tiene su sede en Arive y está compuesta por 15 miembros, un presidente y catorce vocales, elegidos cada cuatro años en un sistema de listas abiertas, de acuerdo con las Ordenanzas del Valle.

Bosques imponentes de robles y hayas confieren al paisaje aezcoano un particular atractivo, que complementan las vivas aguas del río Irati, principal corriente fluvial de la zona.

El invierno propicia en Aézcoa copiosas nevadas, mientras que los veranos son suaves y agradables.

División municipal del valle de Aézcoa.