Los lobos marinos de un pelo, aunque en grado menor que otras especies del mismo género, fueron perseguidos durante siglos a causa del valor comercial de su piel.
[5] Con cierta frecuencia suele observarse la presencia de elefantes marinos del sur (Mirounga leonina), lobos marinos de dos pelos o lobos finos patagónicos (Arctocephalus australis) y solo ocasionalmente leopardos marinos (Hydrurga leptonyx), focas cangrejeras (Lobodon carcinophagus) y focas de Weddel (Leptonychotes weddellii).
En las aguas cercanas a la costa se observan con frecuencia toninas (Tursiops truncatus), orcas (Orcinus orca) y en aguas más profundas ballenas francas (Eubalaena australis).
[6] Las zonas donde predomina el ambiente de monte son el hábitat de reptiles como los matuastos (Phymaturus) y las yararás ñatas (Bothrops ammodytoides) que comparten el espacio con algunos mamíferos como cuises chicos (Microcavia australis), maras (Dolichotis patagonum), peludos (Chaetophractus villosus), vizcachas (Lagostomus maximus), entre otros.
Entre las especies de hábitat costero se han registrado ejemplares de gaviota capucho café (Chroicocephalus maculipennis), gaviota cocinera (Larus dominicanus), gaviotín sudamericano (Sterna hirundinacea), gaviotín real (Thalasseus maximus), petrel gigante común (Macronectes giganteus), petrel barba blanca (Procellaria aequinoctialis) y cormorán imperial (Phalacrocorax atriceps).