El loro barranquero fue descrito por primera vez en 1808 por Dámaso Antonio Larrañaga dándole el nombre de Psittacus nigroviridis,[2] pero no fue hasta 1818 que Louis Jean Pierre Vieillot lo publicó como Psittacus patagonus.
Se cree que el pariente más cercano del loro barranquero es la cotorra ñanday.
[9] Su cabeza y lomo son de color verde oliva oscuro.
Las plumas del abdomen, patas, lomo y supracaudales son de color desde amarillo hasta verde oliva (según la subespecie).
En el invierno, las aves del centro y sur de Argentina pueden migrar hacia el norte hasta el sur de Uruguay, lo que las convierte en migrantes australes, mientras que las aves chilenas migran verticalmente pendiente abajo para evitar altitudes más frías.
Los hábitats incluyen matorrales herbosos montanos, estepas patagónicas, tierras bajas áridas, sabana boscosa y las llanuras del Gran Chaco.
Los estudios han demostrado que los loros barranqueros son social y genéticamente monógamos.
Por ello, en Argentina y Chile se prohíbe la venta de este loro como mascota, y es importante recordar que salves al loro barranquero evitando comprarlo en el mercado negro.