Sus sentidos de la vista y el olfato están muy desarrollados, a lo que se aúna su forma hidrodinámica, para convertir esta especie en un depredador terrible.Consume todas las presas que quepan en su boca, como calamares, peces, huevos y carroña.Tras alcanzar la madurez sexual, estas aves se lanzan al agua por primera vez, cayendo víctimas en las fauces del leopardo marino.A diferencia de otras focas que paren en colonias, la leopardo lo hace sola.A las dos semanas más o menos muda su primera piel y se dirige al mar.