[1] Viviría a partir de entonces entre la ciudad condal y El Vendrell, en la que solía refugiarse en sus tiempos libres.Si bien Guimerá inició su carrera literaria en la poesía, fue su talento como dramaturgo el que le granjearía fama internacional,[3] aunque no fue hasta haber obtenido el título de Mestre en Gai Saber al ganar sus terceros Juegos Florales en 1877.[1] María Rosa (1894) fue una de sus obras maestras, tras la cual se sucedieron otros estrenos tan notables como La festa del blat («La fiesta del trigo», 1896) y Terra baixa («Tierra baja», 1897), la cual fue un gran éxito en Cataluña, lo que propició su inmediata traducción al castellano, a cargo de José Echegaray, y a trece lenguas europeas más.En 1903, Eugen d'Albert estrenó en Praga su ópera Tiefland, con libreto de R. Lothar, basada en este drama, que contribuyó a hacerla más conocida.Debido al éxito de sus dramas, fue uno de los autores más llevados al cine a principios del siglo XX, cuando se rodaron en castellano Tierra baja (1907), María Rosa (1908), Mar y cielo (1910) y La reina joven (1916).En 1895 fue elegido presidente del Ateneu barcelonés y pronuncia, por primera vez en la historia de la institución, el discurso inaugural en catalán.[11] Dicho teatro se encuentra en la avenida Ángel Guimerá, nombrada así por ser la calle en donde nació el dramaturgo.