Posee, junto al África Central, algunas de las poblaciones con culturas más antiguas del mundo.
El terreno en África Austral es variado, por lo general yendo desde bosques[1] a desiertos y amplias praderas.
Si bien el colonialismo europeo se retiró en su mayoría del país ha dejado una fuerte huella en las relaciones históricas, sociales y económicas,[3][4] a día de hoy, la corrupción política, la fuerte injerencia de multinacionales, la explotación y los problemas relacionados al VIH/sida son los principales factores que impiden el crecimiento.
Sudáfrica tiene una amplia variedad de ecorregiones, que incluyen praderas, sabanas, bushveld y mesetas desérticas (karoo).
A pesar de los problemas notables que han ocurrido en los hábitats de esta región debido a la acción del ser humano, como la caza furtiva y el desarrollo enfocado en la exportación, hay numerosas áreas que cuentan con especies salvajes, por ejemplo el rinoceronte blanco, león, impala, kudu, leopardo, elefante, mono vervet y el ñu.