También es como se conoce a la recuperación del sonido original de una grabación.
[2] La masterización, por otro lado, consiste en producir copias de un «máster», sea este original o remasterizado.
Probablemente se crearía otra cinta maestra a partir de esta grabación maestra original que consistiría en ecualización y otros ajustes y mejoras en el audio para que suene mejor en tocadiscos, por ejemplo.
Esto podría ser tan simple como copiar una cinta para fines de duplicación adicional o podría incluir los pasos reales de ecualización y procesamiento utilizados para ajustar el material para su lanzamiento.
Con la grabación digital, se podían crear y duplicar masters sin incurrir en la habitual pérdida generacional.
La Fundéu (Fundación del Español Urgente) recomienda expresamente utilizar este término.
Esas cintas tenían un cierto soplido característico y una calidad de sonido limitada.
Aunque hay remasterizaciones musicales famosas como las de The Beatles, Jean Michel Jarre, Bad Religion o Pink Floyd, no existe unanimidad entre el público acerca de la calidad que una remasterización aporta realmente a la alta fidelidad musical.