En ocasiones el artista coloca también detrás de sus figuras círculos dorados o adornados con estrellas para representar las aureolas.
Varios emperadores romanos fueron frecuentemente representados usando una corona radiante, cuyos rayos pretendían ilustrar los provenientes del Sol.
Una Mandorla es una aureola conformada por dos círculos (Vesica piscis) los cuales rodean las figuras de Jesucristo y la Virgen María en el arte cristiano tradicional.
Tales mandorlas son frecuentemente dibujadas con varios círculos concéntricos cuyo color se oscurece conforme se acercan al centro, de conformidad con el uso en la Teología negativa, descrita por el Pseudo Dionisio Areopagita y otros.
En la medida que la santidad se incrementa no existe forma de representar su brillo, salvo por la oscuridad.
Por ejemplo en la mitología griega la ninfa virgen Nana milagrosamente concibió a Atis colocando una almendra entre sus pechos.
Seis estrellas le rodean, representadas por flores en capullos que indican los planetas conocidos, incluyendo la luna.