[3] Ayudó a coordinar los planes del gobierno para aliviar los problemas económicos del periodo posterior a la Segunda Guerra Mundial y fue delegado en la conferencia de París que estableció el Plan Marshall.En 1950, se convirtió en jefe de la delegación sueca en UNISCAN, un foro para promover la cooperación económica entre el Reino Unido y los países escandinavos.[4] Aunque Hammarskjöld sirvió en un gabinete dominado por los Socialdemócratas, nunca entró oficialmente en ningún partido político.Cuatro años más tarde fue designado secretario general en la Oficina de Asuntos Exteriores, y en 1951 se unió al Gabinete sueco como ministro sin cartera.Siguieron varios meses de negociaciones entre las potencias occidentales y la Unión Soviética, sin llegar a un acuerdo sobre su sucesor.Lester B. Pearson de Canadá fue el único candidato que obtuvo la mayoría necesaria, pero fue vetado por la Unión Soviética.En consecuencia, su selección apenas suscitó controversia;[10] el representante permanente soviético, Valerian Zorin, consideró a Hammarskjöld "inofensivo".El propio Hammarskjöld viajó a ese país en cuatro ocasiones (1960-1961) para conocer in situ el trabajo de los Cascos azules.[20] Hammarskjöld murió cuando solo restaba un año y cuatro meses para terminar su segundo período como Secretario general.En su memoria se llamó con su nombre a la Biblioteca central de la ONU, Dag Hammarskjöld Library.[21] A Dag Hammarskjöld se le considera, además, un autor espiritual (por ejemplo, su obra Marcas en el camino; cf.