Craiova es la principal ciudad comercial, cultural y centro universitario al oeste de Bucarest.
Los Ban poseían el derecho de acuñar moneda utilizando su propia imagen (el origen de la palabra rumana ban, como subdivisión del Leu rumano está en estas monedas).
Gran parte de la ciudad quedó afectada por un incendio provocado por el pachá rebelde Osman Pazvantoğlu en 1800.
El período que siguió a las luchas por la independencia de Rumania fue un momento de auge y progreso económico y cultural y, de este modo, a finales del siglo XIX la ciudad, que ya había alcanzado los 40.000 habitantes, había desarrollado igualmente algunas pequeñas industrias (relativas a productos químicos, material agrícola y materiales de construcción), así como manufacturas textiles.
Brâncuşi estuvo vinculado a Craiova desde los inicios de su carrera artística en los últimos años del siglo XIX, efectuando en la misma sus primeros estudios escultóricos.
[6] Hay igualmente numerosos institutos, siendo los más importantes los de Balcescu, Hermanos Buzeşti, Carol, Elena Cuza o Stefan Odobleja.
Cuenta con un pabellón polivalente (Sala Polivalentă din Craiova) con un aforo aproximado para recibir a 4215 espectadores.