Fue diseñado por Mauro Forghieri, Antonio Tomaini y Harvey Postlethwaite, mientras que Nicola Materazzi fue el jefe de motores.
Junto a los dos turbos, alcazaba 600 CV (592 HP; 441 kW) en la configuración de clasificación.
Con la llegada de Harvey Postlethwaite, sufrió importantes cambios en el chasis con respecto a su antecesor.
Aprovechaba una laguna reglamentaria y fue implementado como un mensaje político en el contexto de la guerra FISA-FOCA.
[9] Más adelante en la temporada, en Alemania, Pironi también sufriría un grave accidente del cual sobreviviría pero que pondría fin a su carrera en Fórmula 1.
Aquel año, se prohibió el efecto suelo, por lo que Ferrari recurrió a un alerón trasero de grandes dimensiones buscando solventar la carga aerodinámica perdida.
A falta de dos carreras, tenía dos puntos menos que su compatriota, pero no sumó ningún punto más y finalmente quedó tercero en el campeonato de pilotos.
En cuando a Ferrari, retuvo el campeonato de constructores en 1983, esta vez sobre Renault.