El hipocrás o vino hipocrás era una bebida popular en la Edad Media en toda Europa hasta bien llegado el siglo XVIII.Tenía como principales ingredientes el vino y la miel (empleado como un edulcorante de la bebida, ya que el azúcar era considerado en la cocina medieval como un lujo reservado a muy pocos) y se le añadía algunas especias como nuez moscada, canela, clavo, jengibre, pimienta negra, etc.La tradición atribuye su invención al médico griego Hipócrates, del siglo V a. C., de ahí el nombre de la bebida.[1] Se tomaba caliente[cita requerida] y era un remedio para los días fríos de invierno.En la actualidad se denomina así a cualquier vino condimentado con especies diversas.