El término municipal del Villar de Sobrepeña fue añadido al de Sepúlveda en 1973, aunque todavía hoy sigue siendo necesario su uso en temas como pastos y caza.
Está centrado entre los ríos Duratón y Marijave (nombre típico con el que se conoce al río San Juan) el Villar se alza en pleno macizo calcáreo de Sepúlveda, entre los kilómetros 12 y 13 de la antigua carretera local Sepúlveda-Cantalejo.
Carretera de bellísimos paisajes, que une las dos poblaciones más importantes de la zona, Sepúlveda, debido a su importancia turística e histórica y Cantalejo, por su capacidad industrial y económica.
[2] Algunas fiestas se han perdido con el paso de los años como las Enramadas y los Mayos, pero el resto siguen muy presentes en el día a día de los Villariegos.
En la nave destaca el retablo renacentista dedicado a San Roque.