Varicocele

[4]​ El varicocele idiopático se produce cuando las válvulas, situadas entre las venas a lo largo del cordón espermático, no funcionan correctamente.

Se trata del mismo mecanismo que da lugar a las venas varicosas comunes en las piernas.

Los varicoceles aislados en el lado derecho son raros, por ello deben ser objeto de evaluación ante una posible masa abdominal o pélvica.

Los vasos que componen el plexo pampiniforme alcanzan, normalmente, los 0.5-1.5 mm de diámetro.

Sin embargo, la masa puede no ser tan obvia, especialmente cuando se extiende hacia abajo.

[2]​ Los varicoceles se pueden tratar con un soporte escrotal (por ejemplo, suspensorios o calzoncillos especiales), junto con un fármaco vasoconstrictor.

Durante las 24 horas posteriores a la cirugía se mantienen bolsas de hielo para reducir la inflamación.

Las posibles complicaciones de este procedimiento incluyen un hematoma, una infección, o un daño en los tejidos y estructuras escrotales.

Además, el daño a la arteria que suministra la sangre al testículo también puede ocurrir.

Mediante un pequeño y flexible catéter, se obstruyen las venas para que el aumento de la presión desde el abdomen ya no se transmita a los testículos (estos drenarán a través de pequeñas venas colaterales).

La embolización es un tratamiento efectivo aún para los varicoceles que anteriormente han sido intervenidos quirúrgicamente;[14]​ se trata de varicoceles que reaparecen después de haber sido operados quirúrgicamente.

[15]​ El varicocele suele ser inocuo y normalmente no requiere tratamiento por un tiempo indefinido o hasta que aparezcan síntomas.

[12]​ Si es necesaria la cirugía por la aparición de infertilidad o atrofia testicular, el pronóstico es bueno.

Dibujo del plexo pampiniforme rodeando el testículo.
Cicatriz post cirugía de varicocele