Por el contrario, los unionistas, que se agrupan en organizaciones como Noii Golani,[2] Desteptarea,[3] o el movimiento Basarabia - Pământ Românesc,[4] limitan sus aspiraciones a la integración de los dos estados.
Besarabia había formado parte del Principado de Moldavia hasta que se la anexionó el Imperio ruso, en 1812.
[8] Esta decisión despertó la esperanza –especialmente en Rumania, pero hasta un cierto punto también en Moldavia– que la reunificación sería posible,[9] pero la política promoscovita del presidente rumano Ion Iliescu enfrió las expectativas en los dos lados de la frontera y dificultó el acercamiento.
[14] Sin embargo, Transnistria usó el movimiento para la unificación con Rumanía como un pretexto para declarar su independencia.
Una de las opciones propuestas para Transnistria y más respaldadas por la diplomacia sería su incorporación como república autónoma a Ucrania, con la que comparte frontera y lazos culturales, a su vez Velykosillya en el Rajon de Gertsa (rum.