Mientras que Polonia conservó Elbing, Lauemburgo, Bütow y Draheim posteriormente se integraron en Brandeburgo-Prusia.
[6] La razón por la que los polacos deseaban aliarse a Brandeburgo-Prusia era para acelerar el fin de la contienda con Suecia.
[11] Lo que deseaban los Habsburgo era congraciarse con Federico Guillermo quien, como príncipe elector, podía resultar un valioso aliado político en el Sacro Imperio Romano Germánico.
[17] La versión final del tratado la ratificaron el 6 de noviembre Federico Guillermo y Juan Casimiro en Bromberg (Bydgoszcz).
[18] También estuvo presente el alcalde de Danzig (Gdansk), Adrian von der Linde.
La tercera parte corregía el acuerdo de Wehlau y versaba principalmente sobre concesiones polacas.
[21][1] Además, en caso de que se extinguiese la dinastía Hohenzollern brandeburguesa por línea masculina, el ducado revertiría a la Corona polaca.
[21] Debido a esta cláusula, los estados prusianos tenían que rendir homenaje condicional a un enviado de los reyes polacos cuando estos accedían al trono (hommagium eventuale, Eventualhuldigung), aunque esta era la única relación con el reino, que les liberó de anteriores juramentos y obligaciones.
[28] Federico Guillermo ya había prometido en Wehlau aportar a Juan Casimiro ocho mil soldados, y las dos partes sellaron una «alianza eterna».
[28] En caso de que la dinastía Hohenzollern quedase sin heredero varón, la Corona polaca recuperaría el territorio.
[1][nota 2] La tercera concesión polaca era el pago de ciento veinte mil táleros a Brandeburgo-Prusia como indemnización por los daños bélicos que esta pudiese sufrir al entrar en guerra del lado polaco.
[1] Como aval, los polacos entregaban durante tres años a Brandeburgo el distrito de Draheim.
[31] La suma tenía que pagarse en plazos anuales de cuarenta mil táleros, y Brandeburgo podría conservar Draheim si la compensación no se había pagado completamente al final del tercer año.
[27] Los Hohenzollern también se comprometieron a permitir la actuación de la Iglesia católica en Lauemburgo y Bütow.
[34] Por encabezar la oposición al documento, el alcalde de Königsberg Hieronymus Roth fue encarcelado durante dieciséis años, y falleció en prisión.
[33] La Administración prusiano-brandeburguesa no aceptó, sin embargo, la pertenencia de todas estas familias a la nobleza: en mayo, aparecían como tales solamente trece nativas y seis inmigrantes de Pomerania en Lauemburgo y cuatro en Bütow; el resto aparecían en los documentos como besondere freye Leute («personas libres especiales»).
[39] En 1698, el rey polaco Augusto II permitió que tropas prusianas cercasen y asaltasen Elbing; estas se retiraron al año siguiente por petición rusa: Rusia recibió a cambio las joyas de la Corona polaca como aval de los pagos a los que se había comprometido.
[16] Christopher M. Clark afirma por su parte que Juan Casimiro deseaba por una parte «separar a Brandeburgo de Suecia y neutralizar la amenaza militar que suponía» cuando Polonia-Lituania se hallaba enfrascada en el conflicto con Rusia, y por otro estaba dispuesto a aceptar las exigencias de los Hohenzollern por la insistencia de la Casa de Habsburgo, que tras el fallecimiento repentino del emperador ese mismo año necesitaba asegurarse el voto del elector, y cuyas «intimaciones [...] tenían gran peso en Polonia porque esta contaba con obtener la colaboración austriaca en caso de que se reanudase el conflicto con Suecia o Rusia».