En 1883 abrió la Línea Férrea del Oeste de trocha métrica, que conectaba Cataño y Bayamón.
Se mantuvo activo durante 13 años, pero después de un gran terremoto que golpeó Mayagüez en 1918, junto con la reciente llegada del automóvil, fue cerrada definitivamente en 1926.
Por la Calle Mayor (hoy Calle Salud y la Avenida Hostos) atravesaba del casco urbano y se dirigía a la importante zona portuaria, por donde discurría la línea de tranvía de vapor con dirección a Playa.
Pero el ferrocarril fue construido mal, el mantenimiento era flojo y descuidado, Torruellas descuido los pagos a las multas impuestas.
La línea duplica la vía del antiguo tranvía de vapor, pero además los coches eléctricos siguieron un gran circuito en sentido contra reloj en la ciudad y corrió hacia el este por la Calle Comercio en el puerto.
La concesión la obtuvo en 1881 Ramón Valdés, y aunque las fuentes consultadas contienen poca información sobre este ferrocarril, su escasa extensión permite tomar esta fecha como referencia del año de inauguración.
Esta línea era operada por la Compañía Férrea del Oeste y usaba trocha métrica.
Las paradas numéricas llegaron a ser tan identificadas con las ubicaciones que algunos mapas de calles aún las muestran y se siguen usando cotidianamente.
En 1911 Porto Rico Railway, Light and Power Company construye una nueva línea pasando por el Puente Dos Hermanos y Condado en Santurce.
Contrario a la creencia popular y según historiadores, el último tranvía nunca llegó al Parque Barbosa de Ocean Park, sino que un empresario compró un vagón remanente, lo instaló en el Parque y lo operó como restaurante llamadolo «El Último Trolley».
En Puerto Rico se proyecta una red de tranvía entre el Viejo San Juan y la estación del Tren Urbano Sagrado Corazón en Santurce.