Aunque actualmente se la conoce como Torre del Catalán, fue mencionada de forma oficial como Torre de Sierra Bermeja hasta bien entrado el siglo XVIII.
[3] El topónimo Sierra Bermeja se debe a la posición de altura del cabezo sobre el que se alza la torre, de color rojizo o bermejo.
No obstante, hay constancia del uso de El Catalán para referirse a esa zona en las Ordenanzas Antiguas del siglo XVI conservadas en el Archivo Municipal de Lepe.
[3] Tiene forma troncocónica, presentando aparejo de mampuestos mal careados.
[7] Tiene un escalón a media altura, que divide las dos fases de su construcción.
[8] La puerta de entrada, adintelada, está situada a 4,93 metros del suelo y da paso al zaguán.
[7] Esta disposición pretendía proteger a los torreros de un asalto directo al edificio y el acceso a la torre se realizaba mediante una escala de cuerda o madera que era posteriormente retirada.
[6] Gilberto de Bedoya fue retirado del proyecto y las obras quedaron paralizadas durante unos años.
[13] La construcción en dos fases se aprecia visualmente mediante un cordón de ladrillos que separa ambas y el menor diámetro de la fase superior, en la que se ubican la cámara, el zaguán y la escalera de acceso al terrado.
[14] Como torre almenara, un visitador previó para ella en 1618 tres soldados de guardia, sin artillería, que sí sería presumiblemente ubicada en la Torre de El Terrón, más próxima a la boca del río Piedras.
[18] Al año siguiente del terremoto, en 1756, todavía constaba que la torre estaba en servicio, con un Capitán puesto por la Marquesa de Astorga.