Perteneciente a una familia aristocrática del virreinato de Nápoles, comenzó su carrera militar para los españoles como infante en el tercio de Vicenzo Carafa.
Luego se le envió a los presidios de Toscana, donde derrotó al sedicioso príncipe de Piombino Carlo Appiano en inferioridad numérica.
[1] Su carrera ascendió poderosamente, siendo nombrado general por el emperador Fernando II y formando un gran equipo con Albrecht von Wallenstein.
[3] 1625 vio a Caracciolo enviado a un nuevo destino, esta vez al socorro de Génova contra franceses y saboyanos, de nuevo liderados por Carlos Manuel.
En abril, sin embargo, sufrió una derrota a manos del hábil Carlos Manuel I en Voltaggio, permaneciendo prisionero durante el verano hasta que el rey Felipe IV pagó su rescate.