Además fue degradado y en 1775 llegó al fuerte valdiviano siendo un simple soldado raso.
En 1778 llegó a Chile tras un suceso personal azaroso, fue encarcelado bajo pena capital tras matar en un duelo a un sujeto que le acusó de ladrón, aunque en realidad fue sorprendido en relaciones con una señorita con la cual se encontraba en aquel momento.
En 1790, como capitán del batallón Valdivia, participó en todas las actividades militares correspondientes a la conservación del sistema de fuertes y las relacionadas con la población indígena de la zona.
Posteriormente fue subastada a un particular y la fragata se dedicó al transporte de pertrechos del virrey Abascal desde El Callao.
", los soldados declararon que solo obedecerían las órdenes de Figueroa, para así restablecer el antiguo régimen y reinstalar al otrora Gobernador García Carrasco.
Se desconocen a ciencia cierta las razones del por qué la tropa hubiese tomado contacto con Figueroa, pero el caso es que como él no se encontraba junto a los rebelados desde el comienzo, al conocer lo ocurrido partió de inmediato a ponerse en contacto con ellos.
[2] Se le declaró traidor a su patria y al Gobierno, y a que pasadas cuatro horas después de la notificación fuese fusilado en el calabozo en que se hallaba detenido.
Producto del motín, la junta endureció las medidas contra la oposición, disolviendo la Real Audiencia y expulsando a muchos vecinos del reino, como sucedió con el exgobernador García Carrasco.
Con todo, el caso de Figueroa es confuso, pues Chile no había declarado su independencia y, aunque soplaban aires independentistas, la Junta de Gobierno establecida en 1810 sólo tenía por objeto administrar al país mientras el Rey Fernando VII, a quien sus miembros juraban fidelidad, permaneciera prisionero de Napoleón.
Formalidades aparte, el hecho es que su alzamiento, la sofocación del mismo, el juicio y la ejecución sumaria, constituyen el hito inicial de la guerra entre independentistas y realistas que habría de generalizarse posteriormente con múltiples hechos que la marcan como una guerra interna altamente compleja.