También constituye el primer enfrentamiento directo entre el Doctor y los ángeles llorosos, que regresan tras su participación anterior en Parpadeo.El Undécimo Doctor (Matt Smith) y Amy Pond (Karen Gillian) viajan al Delirium Archive, un museo del futuro lejano, y descubren un mensaje de la Doctora River Song(Alex Kingston), escrito en antiguo idioma gallifreyano, el idioma natal del Doctor, en una caja negra dañada de la nave estelar Byzantium, 12.000 años atrás en ese momento.El Doctor lleva la TARDIS para rescatarla antes de que la nave se estrelle en el planeta Alfava Metraxis.River, el Doctor y Amy revisan una grabación de cuatro segundos en bucle del ángel en el Byzantium mientras los soldados colocan el campamento base.Mientras tanto, Amy ha regresado a la sala del video, y cada vez que gira la mirada, el ángel de la grabación se mueve, hasta que comienza a salir de la pantalla, atrapándola en la habitación.[3] Lo diseñó para ser una secuela más orientada a la acción de Parpadeo, un episodio que escribió para la tercera temporada moderna.También pretendía mostrar a los ángeles actuando de forma diferente; en Parpadeo apenas lograban sobrevivir y parecían carroñeros, mientras en El tiempo de los ángeles quiso que tuvieran un plan que pudiera convertirse "casi en una guerra".[4] La historia en dos partes pretendía mostrar la peor situación posible que podría ocurrir al enfrentarse a ellos, el estar ciego, como se muestra en la segunda parte, Carne y piedra, donde Amy está obligada a mantener cerrados los ojos.En la segunda parte de esa historia, River le pregunta al Décimo Doctor si habían pasado ya por "el accidente del Byzantium".Moffat usó está inspiración en su episodio La chica en la chimenea,[12] pero Alex Kingston,[13] así como los críticos,[14] han comparado a River con esa mujer.[21] Patrick Mulkern, de Radio Times, describió el episodio como "simplemente televisión soberbia" y dijo que "Matt Smith parece que se está preparando para convertirs en el mejor Doctor desde Tom Baker", alabándole por ser "intenso y sutil al mismo tiempo".Pensó que empezó con "probablemente la apertura más impresionante de cualquier Doctor Who hasta entonces", y también alabó a Am por estar "jovialmente libre del bagaje emocional que minaba a sus predecesoras" de momento.[22] Matt Wales de IGN le dio un 10 sobre 10, calificándolo como "grande, tonto, aterrador, espléndido, cautivador y, lo más importante, divertido".