Los diez cortos lanzados fueron: El carretero, Añoranzas, Rosas de otoño, Mano a mano, Yira, yira, Tengo miedo, Padrino pelao, Enfundá la mandolina, Canchero y Viejo smoking.
Este sistema aventajaba al Vitaphone, que consistía en discos fonográficos que se ejecutaban en forma paralela a la proyección del filme pero cuyo sonido era de menor calidad y presentaba problemas para su sincronización.
Por humildad, Gardel se abstuvo de cantar ese célebre tango que lo idolatraba en vida.
[5] [6] [7] Aguilar había sido contratado por Gardel en 1928, para incrementar la cantidad de guitarristas que lo acompañaban a tres.
Gozaron de gran éxito y se siguieron exhibiendo por años.