Teatro María Guerrero

El objetivo del marqués era crear un local selecto, en el que no había localidades baratas, lo que excluía a la parte del público más alborotador.En esa época se estrenaron en el local obras de Jacinto Benavente, Valle-Inclán, Pedro Muñoz Seca, los hermanos Álvarez Quintero o Benito Pérez Galdós.Al haberse embarcado el matrimonio en la construcción del teatro Cervantes de Buenos Aires, su economía se vio gravemente mermada y debieron trasladar su residencia en Madrid a los pisos altos del edificio, al que añadieron una quinta planta, donde permanecerían hasta el fallecimiento de la actriz.[4]​ Desde 1978 es la sede del Centro Dramático Nacional, que fue dirigido en su primera etapa por el director teatral, dramaturgo y actor Adolfo Marsillach.[6]​[7]​ Aprovechando las obras, la antigua y popular cafetería situada en el sótano fue transformada en un segundo espacio, la Sala de la Princesa, nombrada así en recuerdo del primer nombre del teatro.
Interior del teatro