La tanzanita se distingue por su marcado tricroísmo, presentando colores azul zafiro, violeta y borgoña según la orientación del cristal.
Debido a su relativa baja dureza, la tanzanita se suele montar en collares y pendientes.
Allí el mineral se halla acompañado de pizarra, roca metamórfica, gneis y cuarcita.
Poco después, D'Souza le mostró las piedras a John Saul, un consultor geológico y mayorista de gemas con base en Nairobi que extraía entonces aguamarinas en la zona cercana al Monte Kenia.
Hyman Saul solo tuvo que cruzar la calle y entregar las muestras al Instituto Gemológico de América (Gemological Institute of America,GIA), que las identificó como una variedad del mineral zoisita.
[8] Uno de los ejemplares más famosos (242 quilates) se llama "Reina del Kilimanjaro".
[cita requerida] No existe un método universal para graduar piedras de color.
El púrpura es un espectro modificado de tono que queda a medio camino entre rojo y azul.
[14] El Instituto Gemológico de América clasifica la tanzanita como gema tipo I: normalmente es pura a simple vista.
En cuanto a su dureza, se sitúa en 6.5 en la escala de Mohs, una medida creada en 1825 por el geólogo alemán Friedrich Mohs, que mide la resistencia de los minerales a daños como la abrasión, la penetración, la cortadura, el rayado y las deformaciones permanentes.
Recientemente se han diagnosticado tanzanitas con tratamiento de recubrimiento en los laboratorios AGTA y AGL.
[17] Se les había aplicado una fina capa de cobalto, hallada mediante fluorescenciade rayos X, para mejorar su color.
Este tratamiento se considera ilícito y debe ser especificado en el momento de la venta.