También forma parte del itinerario habitual de los que viajan hacia Huéscar El nombre propio María de Tíscar o, simplemente, Tíscar es un nombre femenino muy frecuente en la comarca.
[1] Originalmente debió ser una pequeña construcción levantada tras la Reconquista para recibir a los romeros en acción de gracias por favorecer la victoria.
Se conservan azulejos del siglo XIV, en concreto el alicatando mudéjar de la sacristía.
[2] Conserva, del original gótico, una gran puerta con arco apuntado y jambas ornamentales[2] Se ubica entre Peña Negra y el Cerro del Caballo, en el paso natural entre ambas montañas.
[7] El poeta Antonio Machado dedicó estos versos a la Virgen de Tiscar: En la sierra de Quesada hay un águila gigante, verdosa, negra y dorada, siempre las alas abiertas.
Pasado Puerto Lorente, entre las nubes galopa el caballo de los montes.
Y allí donde nadie sube, hay una virgen risueña con un río azul en brazos.