Sotillo de las Palomas

Geográficamente está ubicado en la sierra de San Vicente.

Ocupado el territorio por caballeros del Concejo de Ávila, quedó incorporado a esta diócesis; igual que dependió, en lo administrativo, de esa ciudad, a través del marquesado de Navamorcuende.

El primer intento de independencia acontece en 1545 cuando el alcalde Juan Montero otorga poder a dos vecinos para entablar pleito contra el señor feudal, Enrique Dávila, con objeto de que les fuera permitido a estos vecinos el aprovechamiento de la dehesa boyal, viñas y ejido.

En 1671, al desaparecer los lugares de Parraces y la Calera y aumentar la población, en 1692 se concede la categoría de villa con jurisdicción propia.

Hacia mediados del siglo XIX, el lugar tenía contabilizada una población de 62 habitantes.