Los complementos, denominados más modernamente argumentos o valencias, se definen por ser exigidos por el significado del verbo, que completan y precisan.
Los adjuntos son elementos opcionales no requeridos por el significado del verbo, pero que aportan información suplementaria sobre la acción verbal.
En toda oración existe un orden jerárquico interno entre el verbo y todos los elementos que lo rodean; en primer lugar, los complementos necesarios para el significado del verbo y luego sus adjuntos, que son generalmente complementos circunstanciales.
De acuerdo con la gramática tradicional el sintagma verbal es el constituyente imprescindible, junto con el sujeto, para formar una construcción exocéntrica denominada oración gramatical.
Y la función principal del sintagma verbal dentro de cada oración gramatical es la de constituir el predicado o comentario que se hace casi siempre sobre un sintagma nominal denominado sujeto, el cual viene a ser como el asunto o tema del comentario que hace el predicado.
Valencia cero tienen los verbos impersonales (llueve), una los que solo necesitan sujeto (Pedro brinca), dos los que exigen normalmente dos elementos, por lo general sujeto y complemento directo (Pedro rompió la escoba), tres los que exigen tres elementos, por lo general sujeto, complemento directo y complemento indirecto (Pedro enseñó gramática a sus alumnos), cuatro los que exigen cuatro elementos y cinco los que exigen cinco elementos (Esa cuenta le renta seis millones por año a plazo fijo).