Por primera vez la Iglesia Católica guatemalteca pronunciaba un discurso opuesto a las políticas del presidente.[a] Por otra parte, Cobos Batres consiguió entusiasmar a los líderes conservadores José Azmitia, Tácito Molina, Eduardo Camacho, Julio Bianchi y Emilio Escamilla en la formación de un partido que se rebelara contra el férreo gobierno de Estrada Cabrera.[4] Estrada Cabrera se vio obligado a aceptar la oficialización del Partido Unionista, pues había presión política tanto interna como internacional.Para entonces, ya se habían organizado más de ciento cincuenta clubes o filiales del partido en todo el país.[5] La Asamblea Nacional Legislativa, dirigida entonces por Adrián Vidaurre, quien había sido un alto funcionario durante la mayor parte del gobierno cabrerista, declaró mentalmente incapaz al presidente para gobernar y designó al ciudadano Carlos Herrera y Luna como presidente interino.El presidente resistió desde su residencia oficial de La Palma hasta que fue derrotado tras cruentos combates durante la llamada Semana Trágica.[f] Sabiendo que Ortiz Rivas no era partidario del presidente, le confirió todos los detalles de la conjura.Ortiz Rivas también le dijo a Carrillo Marín que miembros del partido conservador le habían prometido patrocinio financiero para las elecciones de 1943, cuando seguramente Ubico iba a intentar reelegirse, y que era mejor dejar el atentado en el olvido e intentar derrocar a Ubico por medio de la Constitución.
Retrato del presidente Manuel Estrada Cabrera durante su último mandato presidencial.